LLEGASTE EL 27 DE ABRIL

 

Te voy a contar una historia, una bella historia que ocurrió un 27 de abril, hace algunos años.

                     YSSEL

Era una tarde, aproximadamente las 5.

Sabíamos que vendrías, pero no sabíamos nada más. ¿Cuál sería tu sexo? ¿Cómo estarían allá en Mérida, la tierra de tu abuelita Ana Rosa, esperando por noticias de tu arribo? Abuela estaba feliz de que fuese justamente allí que nacieras, su tierra amada. 

Pues en esa tarde, estábamos los tres que siempre estábamos juntos: tus abuelos, y yo. Abuelo sentado al lado mío, abuela enfrente. No hablábamos, no podíamos. Yo estaba sentada junto al teléfono. Se me hacían eternos los minutos, era como si el tiempo se hubiese detenido. Y al fin, ese teléfono sonó... Descolgué de inmediato, del otro lado era la voz de tu papá. Dijo "ES UNA NIÑA". Tu papá platicó después que se le respondió de manera inmediata, no escuchó el teléfono con ese "ringgg*... Inmediatamente sólo mi voz y la suya. 

Preguntamos si todo había salido bien y afortunadamente, así fue. 

La voz de tu papá, mi hermano José, era diferente, sabes? Sí, era otra cosa. Era como si el tono de su voz tuviese alguna melodía, como si no hallase la forma de expresar lo que sucedía en él porque tú habías venido a este mundo. Esa melodía me persigue, jamás la podré olvidar, está grabada en mis sentidos y en mi alma.

La emoción de tus abuelos era única. La mía propia, también. La magia de la vida que cumplía su promesa de siempre volver a comenzar. Y sí, era tu comienzo en este andar y el nuestro teniéndote en nuestras vidas.

Cuando eras muy pequeñita te conté la historia de esta llamada. Te llevaba cargando en el supermercado y me decías "cuéntame ota vez ota vez".

No sé cuántas la habré repetido esa tarde. Después, te la conté por varios años más hasta que un día las dos pensamos que ya la sabíamos de memoria, que ya era suficiente.

Pues mira, hoy y aquí te la vuelvo a contar, esta vez dejándola plasmada en unas líneas, me acompañan los más lindos sentimientos al cabo de todo  este tiempo. 

Con esta sonrisa nos tenías locos a todos. Recuerdo como si acabase de suceder todo lo que vivimos ese día, lo contenta que posabas para las fotos. Y yo jugaba contigo como si fuese una niñita como tú. ¡En verdad lo era! Me metía en tu mundo de ilusión y fantasía imaginando toda la magia que había en tu cabecita, todo lo bello que veías el mundo. ¿Sabes? Acababa agotada con los juegos y tú fresca como una lechuguita. Pero ¡Qué importaba! ¡Quién puede quitarme ahora mismo esos recuerdos, ese habernos tirado en el piso a rodar, quién! Porque así de rápido transcurrió tu infancia, así de veloz. 

Hoy te has convertido en una bella mujer. Bella por dentro, bella por fuera. De los tres que estábamos esperando esa llamada, sólo quedo yo. Tus abuelitos y tu papá están en el Cielo. ¡Los hiciste muy felíces, como a mí, sabes? ❗

Te forjaste a base de esfuerzos. Inteligente, estudiosa, juiciosa, madura (más que yo). ¿Sabes que estoy muy orgullosa de ti? Y sabes también que eres lo que me queda de la familia. Y me dices "allí estaré todo el tiempo" y... Me emocionas, como siempre. 

No es porque sea tu tía, créeme que el amor profundo que te tengo no me ciega para ver las cosas que veo en ti. Terminaste tu carrera, ahora trabajas y te sigues desarrollando como la mejor. Ahora que la juventud divaga entre diversiones pasajeras y a veces muy costosas para la vida,  tú te diviertes viviendo, trabajando y dando lo mejor de ti. Buena hija, buena hermana. 

Fue una fortuna poder acudir a tu graduación,  porque un poco después ya comenzó la pandemia. Fue una noche feliz... fría y feliz. ¡Estabas tan alegre, tan linda! ¡Un logro más! 

Sé lo orgulloso que está tu papá, lo sé. 

Por si fuera poco, ahora vives la etapa más especial y feliz de tu vida: ¡El amor tocó a tu puerta! Estar enamorada es uno de los mejores estados de la vida. Tu mirada cambió, tu expresión es esa que sólo sale en ese estado maravilloso y perfecto. Recuerda que una unión no es "ya estamos juntos, a ver qué pasa", sino un "estamos juntos para trabajar en la relación todos los días, para hacerla algo sólido que permanezca". 

Te quiero y me fascinan  tus valores, nunca te alejarás de ellos. 

Empatía, esfuerzo, compasión, sinceridad, justicia, honestidad, fidelidad.

Cuida siempre de ti, sé feliz!  Camina siempre plácida y serena. Afrontarás, estoy segura, los embates de la vida. No todo es felicidad, pero la serenidad te dejará pasar por los parajes ríspidos con una sonrisa. 

Oye, y... Quieres que te cuente otra vez la historia de la llamada?

Nooooooo ¡Hasta otro año! 

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NO TE RINDAS POR FAVOR, NO CEDAS

AUNQUE EL FRÍO QUEME

AUNQUE EL MIEDO MUERDA

AUNQUE EL SOL SE ESCONDA

Y SE CALLE EL VIENTO

         Mario Benedetti

¡¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS!!!

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